Foto: © Archivo CadizNet

El azulejo en la fachada

La tradición de incorporar a la vivienda o cerca de la misma la imagen de un santo o un misterio religioso de devoción, fue en otro tiempo iniciativa de pequeñas comunidades de vecinos, barrios o calles, como en esta casa de la calle Antonio López, antiguamente llamada calle del Calvario, cuyo azulejo representa ese lugar de la crucifixión.

Al estar en plena calle es motivo de una atención más colectiva, aglutinante de las gentes piadosas del barrio. Esta clase de ornamentación de la fachada comenzó a extenderse a partir del siglo XVII, pero es poco frecuente verlos con una reja que lo protege.